Por Víctor Barrera
Ya esta todo listo para que este próximo 18 de marzo, el inquilino de Palacio Nacional nuevamente, por capricho, participe en una marcha, so pretexto de conmemorar el 85 aniversario de la expropiación petrolera realizada por Lázaro Cárdenas del Río.
Sin embargo, todos conocemos que la intención de la marcha es solo mostrar que tiene bajo su control a cientos de legisladores, federales y locales, gobernadores y alcaldes que harán todo lo posible para sufragar los gastos ha realizar para el traslado de la gente desde sus comunidades de origen a la CDMX.
Es decir, sigue realizando su carrera política a costa de aquellos que siguen pensando que el tabasqueño es el transformador de México, porque los recursos saldrán principalmente del erario público federal, de algunos estados y municipios, que a final de cuentas son recursos de todos los mexicanos que pagamos impuestos y servicios del estado.
Sin descartar que algunos legisladores federales de manera voluntaria, “van a destinar parte de su dieta para poder estar presentes, y con ellos algunos de los compañeros que quieren venir también y que, solidariamente, apoyan su traslado las y los diputados”, como lo señalo Ignacio Mier Velasco coordinador de la bancada de Morena en la cámara de diputados y aspirante a gobernador del estado de Puebla.
El poblano, que ya siente ser el ungido para gobernar, agrego que como protagonistas de la transformación, “es una obligación participar o de lo contrario sería una omisión a nuestros rituales”, estas últimas palabras nos demuestran que aquel legislador que quiera seguir teniendo un asiento en el Congreso de la Unión o en otro cargo público deberá pagar por ello.
Ante esto, repito, veremos a miles de personas que serán trasladadas al Zócalo capitalino para participar en una marcha que mostrara nuevamente que quien detenta el poder en el país puede utilizar los recursos publico para su beneficio y no para generar riqueza que significa creación de empleos, con el establecimiento y apertura de mas empresas, que permitan ofrecer salarios realmente importantes para mejorar la calidad de vida de los mexicanos.
Después de la marcha, nadie se acordará de la conmemoración de la expropiación petrolera, pero si se hablará del objetivo real que es la movilización de miles de personas por parte del estado, para el capricho de Macuspanense.
De tal forma que la transformación solo es de dicho, porque la realidad nos muestra que seguimos igual o peor que antes.
