Por Víctor Barrera
Sin duda que el tema de las pensiones para los trabajadores que dejaran de ser parte de la Población Económicamente Activa, es un tema que puede ser utilizado de manera política y es precisamente el inquilino de Palacio Nación quien pretendió dar el manotazo a favor la continuidad de su proyecto de la 4T al ofrecer a los mexicanos la oportunidad de tener una pensión al 100 por ciento de sus salario, con la aprobación de una iniciativa de reforma en la Ley presente y que tendrá que ser aprobada o rechazada por el Congreso de la Unión.
El tabasqueño hizo la primera jugada esperando que la oposición se mantuviera como tal y descalificara esta iniciativa y con ello el tabasqueño tener la oportunidad de seguir acusando a la oposición de estar en contra del “pueblo sabio”, de no querer ayudar a los mas pobres y de paso afectar la vida de quienes están pronto a jubilarse y por supuesto enrolarse en al sector de los adultos mayores.
La respuesta de la oposición fue aceptar esta iniciativa y apoyarla desde antes de conocer cuales serian los detalles de dicha iniciativa, argumentando que por supuesto, los mexicanos requieren de recibir pensiones adecuadas. El PRI, PAN, PRD y hasta su precandidata Xóchitl Gálvez, manifestaron ese apoyo. Ayer MC y el Grupo Plural en el senado manifestaron la apertura a la discusión. Esta jugada realizada por la oposición le arrebata de las manos al tabasqueño una bandera política.
Con esto, obligan al tabasqueño a presentar una iniciativa bien estructurada y por supuesto con los fundamentos financieros suficientes para hacer realidad, Es decir la oposición esta llevando la discusión más allá de la rentabilidad política que buscaba el tabasqueño a unas cuantas semanas de llevarse a cabo los comicios federales.
La oposición ha desnudado al tabasqueño quien tendrá, repito, que presentar una iniciativa bien estructurada para iniciar una discusión fundamentada en los beneficios a los trabajadores, pero sin afectar las ya muy minadas finanzas publicas.
Nadie puede negar la necesidad de que cada trabajador, al cumplir la edad en la cual deberá ya disfrutar de una vida plena sin preocupaciones o presiones financieras, con el ingreso de sus pensión o jubilación fruto de su ahorro cubra holgadamente no solo sus necesidades básicas sino también para realizar actividades de esparcimiento.
De cumplir con esto, desaparecerían “los programas sociales” y con ello las finanzas públicas podrían tener un fortalecimiento económico encaminado a mejorar los sistemas de salud y servicios a la población en general. Para alcanzar esto deberá pasar varios años con crecimientos económicos en el país, creando riqueza que fortalezcan las finazas publicas del país.
De no hacerlo, una propuesta en este sentido siempre será con fines políticos a favor de quien la proponga pero de nulo beneficio paral os trabajadores. En pocas palabras, la oposición le ha pedido al macuspano que cuando realice una propuesta, no solo lo haga presentando el problema sino que ofrezca el remedio y cómo conseguir ese remedio.
