Se oponen empresas y gremios a que Infonavit cree una constructora 

La representación obrera y patronal ante el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit) rechazó la propuesta de que ese organismo tripartita constituya una empresa constructora propia para la edificación de un millón de viviendas, como lo propone el nuevo gobierno federal. 

En la 132 Asamblea General Extraordinaria, Octavio Romero Oropeza director del Instituto afirmó estar abierto al diálogo y defendió la propuesta de que el organismo pueda constituir una empresa estatal y garantice el acceso a una vivienda digna y social. Recalcó que la iniciativa está enfocada principalmente en jefas de familias, jóvenes y adultos mayores. 

Al ratificar que durante su administración será prioridad el Programa Nacional de Vivienda y Regularización, el director del Infonavit aseguró que a través de la constructora estatal se disminuirían los costos con la adquisición consolidada de materiales y servicios, lo que generará empleos directos e indirectos en cada estado y región del país. 

Si bien los sectores obrero y patronal coinciden en alcanzar el objetivo de construir un millón de viviendas –de las cuales 500 mil serán a través del Infonavit–, también externaron sus diferencias con la propuesta de reforma al 123 constitucional en la que se propone que el Infonavit tenga facultades para construir. 

No podemos coincidir en la propuesta de dar un giro que interpretamos como regresivo para operar desde el Infonavit una inmensa empresa constructora o una entidad concentradora de insumos con todos los inconvenientes operativos y normativos que ello supone, ya que las experiencias previas sin duda indican lo poco aconsejable de ello, señaló Claudia Esqueda Llanes, representante del sector de los trabajadores. 

Por el contrario, planteó habilitar al Instituto como una desarrolladora que financie directamente a las mejores empresas constructoras o que invierta en instrumentos financieros especializados. 

Aprovechar tripartismo 

José Medina Mora, presidente de la Coparmex, coincidió en que la constructora estatal sería una regresión. Ese modelo nos coloca en una disyuntiva. Podemos aprovechar las capacidades de nuestro tripartismo, como son la competitividad del sector especializado y de la proveduría, sostuvo. 

Luis Alberto Moreno Gómez, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Desarrollo y Promoción de la Vivienda (Canadevi), estimó que la conformación de una empresa constructora llevaría entre 18 y 24 meses, además requeriría de una estructura organizacional de 10 mil a 12 mil personas a nivel nacional.