¿Nos fue bien o mal en el pasado sexenio?

Por Víctor Barrera

Cuando se busca analizar de manera objetiva algún suceso se debe recurrir a toda la información que sale del mismo, es decir cada versión es una parte de la verdad o la mentira. En cuestión política la mayor parte de los sucesos ocurren porque alguien ofreció una idea que no fue analizada y se implementó, pero los resultados no fueron los esperados, por lo que se acude a los números y cuando el resultado es negativo y se minimiza a través de la utilización de porcentajes, cuando este es positivo se acude a las cifras en miles o millones.

Este 2024 dio fin a uno de los sexenios más polémicos de muestra historia, porque la sociedad mexicana aún se encuentra dividida y no existe una apreciación exacta de lo que ocurrió a lo largo de seis años, donde un político, que se dijo ser de izquierda, gobernó. Realizo una serie de obras que desde su punto de vista ayudarían a la gente a mejorar su calidad de vida y a superar la pobreza.

Para algunos, este político ha sido el mejor en la historia, para otros ha sido el peor. Pero para más o menos entender y conocer un poco más de cerca estos resultados tendremos que ir a los números, que aun que fríos muestran una realidad que muchos quieren dejar de lado.

Empecemos, se dice que este primer sexenio de izquierda, si así se puede catalogar, logro resultados positivos que han empezado a cambiar la situación de millones de mexicanos, Sin embargo los números muestran todo lo contrario.

En 2018 de acuerdo a las cifras oficiales el número de mexicanos en pobreza extrema se ubicaba en 8.7 millones, al concluir el sexenio esta cifra se colocó en 9.1 millones, esto significa que al menos 400 mil personas cayeron en este rubro de pobreza extrema, es decir se incrementó.

El siguiente sector poblacional, la clase media, en 2018 se constituía por el 46.7 por ciento del total del a población mexicana. En el 2024 solo es el 40 por ciento, es decir un total de 6.7 por ciento de población se ubicó en otro nivel, siendo este el de la pobreza. Se expreso que se trabajaría primero para los pobres, pero este sector aumento y no disminuyo.

La pobreza que se genero fue porque a pesar de los esfuerzos que el Banco de México realizó para mantener un nivel de inflación cercano al 3 por ciento, después de que en 2018 este índice se colocó en 4.19 por ciento, nivel que escandalizó al gobierno de izquierda. Pero los resultados para este 2024, son que la inflación se colocó en 5.53 por ciento. Cifra que impacta de manera importante en la gente que menos tiene.

Si a esto sumamos los productos básicos siguen siendo inalcanzables para mucha gente y que esto se combate realizando transacciones directas en programas sociales y no en la creación de infraestructura para atraer más inversión. El resultado es que se cierren fuentes de empleo y muchos de los connacionales opten por ir a Estados Unidos. Esto incremento el dinero en remesas para muchas familias, pero tampoco han sido la solución para sacarlos de su situación de pobreza.

Se argumento que con las obras que se realizarían a lo largo del sexenio, la economía nacional mostraría un crecimiento importante, pero estas obras se iniciaron con recursos de fondos y fideicomisos, desaparecidos, que estaban destinados a solventar problemas como acontecimientos meteorológicos, o para el apoyo a compra de medicamento. También existieron para para apoyar a los cuerpos de policías estatales y municipales en el combate a la delincuencia. Pero ante la desaparición de los fondos y fideicomiso, no hubo recursos, para hacer frente a los daños ocasionados por los fenómenos meteorológicos presentados en este sexenio dejando desastres que no se han podido subsanar, la delincuencia llamada organizada ante la falta de cuerpos policiacos que les hicieran frente se apoderó de una tercera parte del país, donde gobiernan y administran la riqueza, también dejaron más de 200 mil personas muertas por estas organizaciones y la compra de medicamentos disminuyo ocasionando eral fallecimiento de mucha gente.

También se debe apuntar que se prometió no endeudar al país, es decir a todos los mexicanos, pero esto se incumplió y la deuda que tenía el gobierno federal en 2018 era de 8.2 billones de pesos, para este 2024 el total de la deuda se incrementó para ubicarse en 10.6 billones, lo que implica que el ingreso per cápita disminuyo, esto es somos más pobres

En los primeros meses de este nuevo sexenio, muchos políticos de izquierda se ufanan de los resultados y aseguran que se consolidará un segundo piso del proyecto denominado 4T. Si el primer piso fue desastroso, probablemente el segundo no nos depara nada favorable.

Afortunadamente, los mexicanos tenemos la oportunidad de que a través de nuestro voto podamos corregir el rumbo del país, es cuestión de que el INE, encargado de organizar, realizar y calificar los comicios sea totalmente autónomo y cuente con los recursos suficientes para evitar cualquier duda de fraude. Pero ante los cambios de leyes y modificaciones presupuestales, el INE tampoco tiene un buen futuro y es por esos que aun se escucha a lo lejos la frase! Al diablo con las instituciones ¡