Después de que la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) dio a conocer la existencia de una red de sobornos dentro de Petróleos Mexicanos (Pemex) para agilizar el pago a proveedores, la empresa respondió con una tarjeta informativa en la que pidió a sus contratistas “no dejarse sorprender” y ofreció una vía para denunciar. Sin embargo, Proceso verificó que el número telefónico proporcionado no existe.
La tarde del 11 de julio, Pemex, bajo la dirección general de Víctor Rodríguez Padilla, difundió una tarjeta informativa dirigida a sus proveedores, en la que llamó a no caer en manos de gestores o intermediarios, comúnmente conocidos como coyotes, que ofrecen liberar pagos a cambio de una comisión.
“Pemex hace un llamado a sus proveedores, para no dejarse sorprender ni engañar por supuestos gestores o intermediarios, conocidos como “coyotes”, que prometen facilitar trámites a cambio de una comisión económica”, señaló.
En caso de enfrentar estas irregularidades, Pemex indicó que las denuncias deben ser canalizadas a la Unidad de Responsabilidades, a través del siguiente portal:
En ese sitio, la empresa estatal enlistó como canales de contacto los números:Ciudad de México: (01) 55 1944 2500, extensiones 70423 y 70447. Lada sin costo: 800 522 6363.
Proceso acompañó y grabó a un proveedor que intentó hacer la denuncia y, al marcar el número y la extensión indicada, el sistema respondió de inmediato: “El número que marca no existe”.
La llamada fue redirigida a una operadora, quien confirmó que esos eran los números correspondientes para levantar quejas, pero no supo explicar por qué el sistema lo rechaza.
En llamadas posteriores, realizadas con distintos proveedores y en horarios distintos, el resultado fue el mismo, el mensaje automático indica que la extensión no existe.
Es decir, la única vía oficial ofrecida por Pemex para denunciar presuntas extorsiones está inhabilitada o no funciona correctamente.
Este 10 de julio, Coparmex emitió un posicionamiento público dirigido a la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, en el que informó que la deuda acumulada de Pemex con proveedores no solo amenaza la viabilidad financiera de cientos de empresas, sino que ya estaría dando pie a esquemas de corrupción dentro de la petrolera.
“Distintas empresas han denunciado presiones indebidas y posibles actos de corrupción al interior de Pemex para liberar pagos legítimamente adeudados. No podemos permitir que el cobro por servicios contratados derive en procesos opacos o condicionados”, subrayó el organismo empresarial.
En su comunicado, Coparmex puntualizó que las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes) de Ciudad del Carmen, Tapachula, Hidalgo, Irapuato, Tamaulipas, Oaxaca, Reynosa, Tabasco, Tampico y Veracruz son las que están enfrentando una crisis de liquidez que pone en riesgo su supervivencia, debido al incumplimiento de pagos por parte de Pemex.
Para dimensionar la situación de la deuda con proveedores, la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) estima que con el sector asciende ya a 7 mil millones de pesos, una cifra sin precedentes.
Al 31 de marzo de este año, se reportó que la deuda de proveedores se ubica en 404 mil millones de pesos.