Por Víctor Barrera
Recientemente se aprobó una parte del Paquete Económico 2026, que es precisamente lo referente a los ingresos que obtendrá el gobierno federal y que son recursos que utilizará para alcanzar los objetivos de desarrollo, crecimiento económico, construcción de infraestructura, pago de pensiones, jubilaciones deuda y todo lo referente a la administración de los recursos nacionales a favor de la población.
Algo que suena pertinente cuando en al menos 5 estados de la república, las intensas lluvias inundaron una gran parte de sus municipios y mucha gente no solo perdió bienes e inmuebles, sino aún se encuentran incomunicados porque los caminos que llegan a estas comunidades se perdieron, pero también porque las autoridades estatales no previeron el desastre natural y no se prepararon. Ahora sera cuestión de dinero, aunque lo niegue la gobernadora de Veracruz, Rocío Nahle.
Pero en estos días se aprobó, por parte de los legisladores del oficialismo. Morena. PT y PVEM, un incremento al IEPS, a bebidas azucaras, que será utilizado para remediar los males ocasionados por la lluvias o posiblemente para ofrecer contratos directos a sus amigos para la construcción de cualquier obra, pero no precisamente para la justificación que desde el gobierno se ofreció para dicho aumento, una política de salud pública que serviría para comprar medicamentos, modernizar los equipos de los hospitales o construir más hospitales, contratar doctores mexicanos y no cubanos o recuperar parques, sin construir UTOPIAS, para que la gente realice ejercicio.
Porque también subieron el impuesto a los videojuegos violentos, porque claro, la verdadera amenaza para la seguridad nacional no son los cárteles que controlan medio país, a gobiernos estatales y municipales, tampoco la impunidad ni las redes de corrupción, sino los infantes y adolescentes jugando, videojuegos violentos encerrados en sus casas.
Esto indica que el gobierno necesita dinero, desesperadamente, porque. Andrés Manuel López Obrador le dejó a Claudia Sheinbaum un país sostenido con alfileres, que no soportará una ocurrencia más. Sin embargo, cada día que pasa nos enteramos de que los programas sociales se amplían para grupos vulnerables en los estados de la república y si en estos estados no hay dinero para pagar al os maestros, como en San Luís Potosí, el gobierno les pagará, aunque no tenga dinero.
Asi el gobierno federal tiene que conseguir recursos de donde sea y la solución brillante fue sacarle más dinero al pueblo sabio, que los eligió confiando en sus promesas y que ahora empiezan a conocer que en verdad no son iguales a los anteriores, sino son peores.
Este gobierno y sus testaferros han utilizado los recursos públicos como suyos y han engañado a la gente, al pueblo sabio.
Pero no solo es la cosa de dinero, porque en estos días también estos legisladores, del oficialismo, modificó la Ley de Amparo, haciendo retroactivo lo que según ellos no lo es. De esta forma la razón siempre estará de parte del gobierno y si alguien tiene un juicio de amparo en curso defendiéndose de alguna autoridad, las etapas que ya pasaron siguen con las reglas viejas; pero si el juicio sigue, todo lo que viene después se rige por la nueva ley. Estos cambios de reglas, por supuesto que aumenta la desconfianza de los inversionistas y esto puede ser negativo para el desarrollo del país.
Así que el agua que inundo a poblados de 5 estados puede compararse con el agua que, hasta el cuello del gobierno federal, porque, aunque se obtengan más recursos no serán los suficientes para que México erradique la corrupción porque este mal se alimenta anta cada vez con más dinero y si existe será para ello y no para las promesas.