Para la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores de México (ASPA), la cancelación de 13 rutas entre México y Estados Unidos, tanto desde el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) como desde el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), pudo haberse evitado si el gobierno mexicano hubiera escuchado al sector aeronáutico.
Esta situación evidencia la falta de una visión de Estado que reconozca la importancia estratégica de la aviación como motor de conectividad, desarrollo y empleo”, se lee en el posicionamiento publicado la mañana de este miércoles 29 de octubre.
“Sin embargo, nuestra voz no ha encontrado el eco necesario”, señaló ASPA.
Para varios representantes del sector, la actual crisis tiene su origen en una serie de decisiones unilaterales del Estado mexicano, tomadas sin consulta al sector privado.
Entre ellas destacan la reconfiguración del espacio aéreo en favor del AIFA y, como antecedente directo, la cancelación del aeropuerto de Texcoco, acciones que alteraron el equilibrio de la conectividad aérea del país.
“Lo advertimos con antelación: las decisiones adoptadas sin una perspectiva técnica ni de largo plazo han derivado en un escenario de incertidumbre laboral y económica que hoy se materializa a raíz de las órdenes emitidas por el DOT”, sostuvo ASPA.
El analista en Comercio Internacional, Jorge Molina, explicó que el AIFA es percibido en Washington como una barrera no arancelaria, lo que ha despertado preocupación entre las autoridades estadunidenses.
Indirectamente sí se ve en el T-MEC, en el capítulo de transporte y lo que tiene que ver con los capítulos de reglas de comercio”, apuntó.
ASPA llamó al gobierno de Claudia Sheinbaum Pardo a actuar, y a restablecer las condiciones de equidad previstas en el Acuerdo Bilateral de Transporte Aéreo de 2015, que rige la relación aeronáutica entre ambos países.
ASPA subrayó que las órdenes del Departamento de Transporte de Estados Unidos (DOT) limitan y condicionan las operaciones de las aerolíneas mexicanas hacia territorio estadounidense, lo que podría afectar gravemente la conectividad aérea, la competitividad del sector y miles de empleos que dependen directamente de la aviación.
“Estas disposiciones podrían afectar gravemente la conectividad aérea, la competitividad de la aviación nacional y los miles de empleos que dependen directamente de este sector, impactando a pasajeros, trabajadores y empresas vinculadas con la industria aérea”, sostuvo ASPA.

