El INE aprueba la destrucción de boletas de la elección judicial

Concluidos los cómputos y las numerosas controversias que derivaron de la elección judicial, el Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE) aprobó hoy la destrucción de las más de 601 millones boletas que fueron imprimidas para este ejercicio inédito; más de 522 millones de ellas no fueron utilizadas, pues el 87% de los votantes no acudió a las urnas para elegir los jueces, magistrados y ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN). 

Bajo la encomienda de la reforma judicial impulsada por el expresidente Andrés Manuel López Obrador y aprobada por la mayoría legislativa de Morena en el Poder Legislativo, el INE tuvo que mandar a imprimir una boleta por cada una de las nueve categorías de cargos judiciales en juego, y repetir la operación por cada votante, lo que dio un total de 601 millones 987 mil 276 boletas electorales, con diversos formatos y niveles de seguridad, una cifra casi dos veces mayor a las boletas impresas para la elección de 2024. 

En un primer momento, el INE contempló una inversión de 500 millones de pesos para la impresión de las boletas –realizada en los Talleres Gráficos de México– pero el 26 de diciembre de 2024 determinó una ampliación de 254 millones de pesos para este fin, lo que elevó su costo a 754 millones de pesos. 

Pese a las campañas del oficialismo para incentivar a las personas a salir a votar, apenas el 13% de la población fue a las urnas el pasado 1 de junio, y una de cada cuatro lo hizo para anular su voto, ya sea con voto nulo o con boletas incompletas.  

Aunque la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo y los cuadros de Morena han sostenido que la elección fue “todo un éxito”, la tasa de abstención histórica fue criticada por los detractores de la reforma judicial, quienes han cuestionado la legitimidad de los jueces que salieron electos. 

A un nivel logístico, la tasa de abstención histórica de la elección judicial implicó la impresión y destrucción de aproximadamente 522 millones de boletas que permanecieron intocadas, es decir, el 87% del número total.