Tras una lucha ciudadana que duró varios meses, este miércoles se anunció la reapertura de los accesos públicos a las playas que se encuentran bajo el control de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) en el Parque Nacional del Jaguar, en Tulum, aunque las restricciones para evitar el ingreso con elementos contaminantes continuará.
Este miércoles, representantes de los tres órdenes de gobierno anunciaron la reapertura, de manera gratuita, del principal acceso a las playas por el camino que conduce a la zona arqueológica de Tulum.
Lo anterior como parte de las negociaciones que se venían realizando principalmente entre la Secretaría de Turismo de México y los representantes de la Sedena, que controlan el área natural protegida a través de la paraestatal Grupo Aeroportuario, Ferroviario, de Servicios Auxiliares y Conexos Olmeca Maya Mexica (Gafsacomm).
Esa zona quedó restringida desde diciembre de 2024, cuando el Ejército comenzó formalmente a controlar los accesos al litoral, pues meses antes había tomado la administración del Parque Nacional del Jaguar y Parque Nacional de Tulum.
Fue precisamente el acceso por la zona arqueológica que resultó gravemente dañada económicamente, porque ahí se ubica un importante centro de artesanías que registró cierre de negocios.
Los bañistas se negaban a ingresar a la playa porque el costo era de 105 pesos para residentes quintanarroenses y 415 pesos para extranjeros.
Proceso publicó un reportaje en su número de septiembre, que detalló el impacto que trajo el Ejército con el control de ambas áreas naturales protegidas.
Esto ocasionó diversas protestas enérgicas de ciudadanos por el impacto negativo del destino y el menoscabo del derecho de acceso libre a las playas.
En un comunicado emitido por el gobierno de Quintana Roo, la gobernadora Mara Lezama Espinosa, acompañada de Josefina Rodríguez Zamora, secretaria de Turismo, confirmaron que son cinco playas a las que se podrá acceder de manera gratuita.
Además, desde la semana pasada el alcalde de Tulum, Diego Castañón Trejo, anunció la apertura de dos accesos a la costa por la zona hotelera, establecimientos que recientemente fueron criticados a nivel nacional por ofrecer precios elevados a turistas.
Hace unas semanas Tulum era tendencia nacional en redes sociales, debido al desplome de ocupación hotelera, atribuido no sólo al control de las playas por la Sedena, sino también por el señalamiento de precios de servicios y productos sumamente elevados.
Actualmente el destino busca recuperar el turismo, aunque los problemas de inseguridad todavía persisten, como los dos homicidios violentos reportados por medios de comunicación locales la noche del martes.

