Senadores de la 4T aprueban la reforma que prohíbe los vapeadores

 Los senadores oficialistas aprobaron la reforma a la Ley de Salud en materia de vapeadores que fija nuevas penas para quien participe en la producción, fabricación, mezclado, acondicionamiento, envasado, manipulación, transporte, almacenamiento, importación, exportación, comercio, distribución y venta de cigarrillos electrónicos o vapeadores. 

La reforma fue aprobada en lo general y en lo particular por 76 votos a favor y 37 en contra. 

La norma fija la prohibición total de publicidad o propaganda para promover cigarrillos electrónicos, vapeadores y demás sistemas o dispositivos análogos, a través de cualquier medio impreso, digital, televisivo o radial.  

Pese a que se presentaron nueve reservas, sólo se conservó la realizada en San Lázaro que modificó el artículo 282 Quater y cambia la redacción ante la protesta de la oposición, para que quede de la siente forma:  

“Queda prohibido en todo el territorio nacional la adquisición con fines de comercialización, preparación producción, fabricación, mezclado acondicionamiento, envasado, transporte con fines comerciales, almacenamiento importación, comercio, exportación, distribución, venta y suministro de cigarrillos electrónicos, vapeadores”, detalla.  

La reforma fue enviada a la presidenta Claudia Sheinbaum para que la publique en el Diario Oficial de la Federación (DOF) y entre en vigor.  

Durante la discusión, los morenistas se mantenían confiados ante los reclamos de los senadores opositores por la reforma, quienes portaban carteles con la leyenda «Morena quería meter a los jóvenes a la cárcel». Incluso el senador Félix Salgado Macedonio se puso una máscara durante el debate. 

El único morenista que perdió el control, pero no por la reforma, fue el senador Miguel Ángel Yunes, quien se molestó por el comentario del legislador panista Marko Cortés, que le llamó “chapulín”, y provocó que el morenista se defendiera a gritos ante lo que calificó de «linchamiento» por parte de las bancadas opositoras por su voto en la reforma judicial.  

Por su parte, la senadora del PRI, Carolina Viggiano, resaltó que el cambio al artículo 282 Quáter no es claro y deja ambigüedades.  

“El artículo 282 Quáter, que tanto han dicho que ya se arregló, no es claro. Deja abiertas conductas, no solo una, sino todas las demás que se pretenden establecer, porque ese artículo habla de una serie de verbos. Y los verbos en materia penal son aquellos que describen la conducta prohibida que constituye el delito.  

“Hay un desglosado de manera inadecuada. La prohibición solamente está y la excepción. La prohibición solamente la tiene para fines de adquisición y para fines de transporte con fines comerciales. También debo decir que habla de dispositivos análogos. Hablar de dispositivos análogos no señala cuáles”, resaltó.  

Con la aprobación de la reforma, la presidenta de la Mesa Directiva del Senado dio lectura a los dictámenes recibidos durante el día y dio un discurso sobre el trabajo legislativo realizado en la Cámara Alta, y en punto de la 10 de la noche, con la entonación del Himno Nacional, dio por terminado el periodo de sesiones ante los aplausos de los legisladores oficialistas.