Luego de que la Presidenta Claudia Sheinbaum descartó hoy la creación de un impuesto a los videojuegos, la Diputada Federal de Movimiento Ciudadano por Nuevo León, Iraís Reyes, celebró la decisión al considerar que se evitó una medida que desde el inicio era inviable en la práctica.
La legisladora recordó que desde que la propuesta fue planteada advirtió que no sólo afectaría la economía de los jóvenes y las familias, sino que también abría la puerta a un problema mayor: la falta de criterios claros para definir qué contenidos podrían considerarse violentos.
“Más allá del impacto económico, el principal problema era la ausencia de una definición clara sobre qué se pretendía gravar. Como lo señalé en tribuna, en medios y en podcasts de la comunidad gamer: este impuesto presentaba la interrogante básica de quién decide qué es violento”, dijo Iraís.
“Era una puerta que se abría al autoritarismo el hecho de que el gobierno cobrara nuevos impuestos con base en lo que a su criterio considerase qué es violento”.
Añadió que querían castigar a quien está jugando en casa, en lugar de resolver problemas que de verdad urge atender para acabar con la inseguridad en el país.
Iraís subrayó que establecer un impuesto con criterios subjetivos habría generado discrecionalidad, confusión legal y riesgos de censura.
Destacó que la postura fijada desde el Ejecutivo Federal confirma que el enfoque era incorrecto y que desechar el impuesto representa un avance en favor de políticas públicas claras, justas y aplicables.
La Diputada Federal reiteró que seguirá impulsando una agenda legislativa que proteja la economía familiar, respete la libertad cultural y evite regulaciones que carezcan de sustento.

