Se acaba la pobreza y crece la clase media.

Por Víctor Barrera

Ante la falta de resultados reales, en Palacio Nacional se siguen creando medias verdades o medias mentiras, para obtener por lo menos un punto positivo de la llamada 4T, en estos últimos siete años.

Ayer mismo Sheinbaum Pardo manifestó que en México la clase media se ha incrementado, porque se ha trabajado para combatir la pobreza, Sin embargo, si nos ajustamos al termino pobreza esta sigue presente en la mayoría de las familias mexicanas.

Hace algunos meses, cuando se dio la información sobre que en México ya habían salido de la pobreza 13. 4 millones de personas, le pregunté a Ricardo Monreal si en verdad creía en esta cifra y le manifesté que pobreza es carecer de algo. Para ello argumente que mucha gente carece de un sistema de salud adecuado, de una educación académica suficiente, de un trabajo bien remunerado y la repuesta del zacatecano fue en tono de molestia “Yo sí creo que hay menos pobres en México”.

En todos estos meses he cuestionado sobre los resultados que el INEGI anuncia cada mes y que, lamentablemente, subrayan las carencias en millones de familias. La respuesta del coordinador legislativo ha sido “Ustedes hablan de cifras, las cuales no son reales, porque la realidad es que la gente ya no es pobre en el país».

Ayer cuando Sheinbaum Pardo habló sobre la pobreza, no hubo una explicación a profundidad y reitero que ahora ya son 13.5 millones de personas que han dejado la pobreza y se han sumado a la clase media del país.

Quizás la aseveración de Sheinbaum Pardo es una que algún asesor le indicó, pero no le explicó que la pobreza real sigue estando presente en la escasez de muchas cosas para millones de personas. Salir de la pobreza no significa tener un ingreso por encima de un mínimo indispensable para comprar una canasta básica alimentaria, porque los incrementos otorgados al salario mínimo han sido rebasados por el nivel de inflación. Donde los productos de mayor demanda presentan precisamente precios por encima del porcentaje de inflación.

No se sale de la pobreza por recibir cada dos meses un ingreso adicional a través de los programas sociales, porque estos recursos en su mayoría sirven solo para cubrir los gastos de las necesidades persistentes, principalmente los medicamentos.

No se sale de la pobreza, cuando los alimentos que ingiere la mayoría del país no son nutritivos y solo ocasionan enfermedades como la obesidad o lamentablemente otras enfermedades degenerativas que para controlarlas es necesario gastar en medicamentos que el sistema de salud no provee.

No se sale de la pobreza cuando un país no crea los empleos suficientes para las personas que están en edad de laborar y tampoco se crea riqueza con los productos de esas empresas, porque ante la falta de mano de obra la producción disminuye. Si a esto sumamos que el costo de producción se eleva, entonces pocas personas acceden a esos productos.

Tampoco se sale de la pobreza si existe ausencia de un empleo, porque los empleadores recortan las nóminas para producir lo suficiente para mantener abierta su empresa o negocio. Por tanto, un país sin crear riqueza se mantiene en el margen de la pobreza., y así está la mayoría de los mexicanos que laboran en el sector informal, el INEGI señala que es el 55 por ciento de la población en edad de laborar, sin sumar a quienes cada año cumplan la edad para incorporarse al sector laboral pero no lo hace por la falta de empleo.

Sheinbaum Pardo se atrevió a señalar también que las remesas, que son recursos enviados por mexicanos que han salido al exterior en busca de trabajo, son parte fundamental para las familias mexicanas. Como si el expulsar a gente del país por falta de empleo sea un logro del gobierno, cuando es todo lo contrario.

Un país no puede seguir expulsando a la gente porque no se crean los empleos suficientes. Poque la labor del gobierno es crear las condiciones para atraer inversión, generar empleos bien remunerados y reactivar un mercado interno real. Sin transferencias del gobierno a la gente, sino creando la riqueza para que la gente y el estado tengan finanzas sanas familiares y de gobierno.

Salir de la pobreza entonces es tener crecimientos económicos sostenidos que permitan infraestructura adecuada para la inversión, para tener sistemas de salud y educativo que permitan mejorar la calidad de vida y movilidad social de la población Que haya seguridad pública, que el respete el estado de derecho y la libertad de expresión, que no exista la corrupción.

Por todo esto, más que repetir una frase de un asesor despistado, es importante que Claudia Sheinbaum se centre en cuidar a esa clase media para que empuje al crecimiento económico del país. Algo que la 4T ha dejado en el olvido, porque ahora ellos son los nuevos multimillonarios. La pobreza es algo que han olvidado.