Plantea marco ético para el uso de la Inteligencia Artificial

El diputado federal Hugo Gutiérrez Arroyo planteó reformar el párrafo tercero del Artículo 6 de la Constitución mexicana en materia de Inteligencia Artificial (IA), para que se reconozca su uso y se establezca que su desarrollo, aplicación y utilización se rijan por principios de ética, dignidad humana, seguridad, protección de datos personales, transparencia, responsabilidad, inclusión y respeto a los derechos humanos.

Asimismo, propuso adicionar la fracción XXIX-A al Artículo 73 de la misma Constitución, con el fin de facultar al Congreso de la Unión para legislar en materia de Inteligencia Artificial, estableciendo las bases para su desarrollo, uso y aplicación, conforme a los principios y derechos previstos en la Carta Magna.

El legislador explicó que su iniciativa parte de una convicción fundamental: el desarrollo tecnológico debe estar al servicio de la humanidad y no a la inversa. El objetivo no es frenar el progreso, sino encauzarlo, afirmó.

“Buscamos sentar las bases para que México no sólo sea un consumidor de tecnologías desarrolladas en otras latitudes, sino un actor protagónico en la conversación global sobre el uso de la Inteligencia Artificial bajo criterios éticos, responsables y centrados en el bienestar de las personas”, agregó.

Sostuvo que reconocer a la IA en la Constitución es el primer paso para construir una política de Estado que garantice su despliegue con transparencia, equidad, seguridad y respeto a la dignidad humana, asegurando que el futuro digital sea inclusivo y genere oportunidades para todas y todos los mexicanos.

Subrayó que este reconocimiento permitiría al Congreso diseñar un marco normativo propio, adaptado a las necesidades y al contexto nacional, que fomente la innovación y el desarrollo económico, siempre subordinado al respeto irrestricto de la dignidad y los derechos humanos.

El diputado Hugo Gutiérrez señaló que el análisis de los modelos aplicados en Estados Unidos, Canadá y la Unión Europea —esta última pionera con su propuesta de Reglamento sobre normas armonizadas en materia de Inteligencia Artificial— evidencia una tendencia global hacia la necesidad de establecer reglas claras. La experiencia internacional, en particular el enfoque preventivo y basado en derechos de la Unión Europea, ofrece una hoja de ruta valiosa para México.

Consideró que el desarrollo de la IA no es un simple avance tecnológico, sino un cambio de paradigma con profundas implicaciones éticas, sociales, jurídicas y culturales. “Así como la imprenta democratizó el conocimiento y la Revolución Industrial transformó la producción, la Inteligencia Artificial está destinada a redefinir los contornos de nuestra sociedad”, expresó.

Finalmente, el congresista del PRI comentó que su integración en el tejido social no puede ser un proceso desregulado o espontáneo. Requiere de una acción decidida y visionaria del Estado para establecer un marco normativo que, por un lado, fomente la innovación y el aprovechamiento de sus beneficios, y por el otro, salvaguarde los derechos fundamentales que constituyen el pilar de la República.